En estas latitudes, las temporadas electorales y los politiqueros que aparecen cada cuatro años para seguir haciendo daño, refuerzan y le dan plena razón a estos pensamientos de Gómez Dávila (2005):
"Patrocinar al pobre ha sido siempre, en política, el más seguro medio de enriquecerse" (p. 156).
"El pueblo soporta que lo roben siempre que lo adulen" (p. 156).
"La esperanza progresista no anida ya sino en discursos" (p. 157).
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Gómez D., N. (2005). Escolios I. Bogotá: Villegas.
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